Praga (zprávy.seznam.cz) – La Empresa Praguense del Transporte (DPP) ha mandado a rodar por la capital checa un vagón de tranvía que cuenta con un diseño especial; busca alertar y recordarle a los peatones que en la Rep. Checa el tranvía tiene preferencial en los cruces. Esto se volvió una necesidad debido a que crece la cantidad de personas que han muerto tras una embestida de un tranvía.
Si en el año 2017 murieron tras chocar con un tranvía un total de tres personas, en el 2018 fueron ocho. Así lo informó ayer el vicealcalde capitalino, Adam Scheiherr (Praga para simisma) y el director general de DPP, Petr Witowski. DPP es una empresa municipal que además de tranvías también utiliza para el transporte público capitalino autobuses, Metro y el funicular. El tranvía viste un llamativo color amarillo, con letras en negro y siluetas de peatones chocados. Se ve también una especie de marcador, donde el peatón pierde 1 a 0 frente al tranvía. Hay mensajes inscritos y que recuerdan las principales fallas de los peatones: no prestan atención, no le dan preferencia al tranvía. Existe también el problema de caminar al mismo tiempo de ir concentrado en algo en el celular, o caminar con los auriculares o cascos puestos. O también deciden cruzar la calle, pero metiéndose entre autos, con lo cual no pueden tener una visión clara de lo que viene.
“Aumenta la cantidad de personas que mueren tras chocar con un travía, pero, también aumenta el número de accidentes de los tranvías con los peatones. Por suerte, la mayoría de esos accidentes terminan sólo con un susto inmenso, con algún moretón. Pero, en el momento en que tenemos aquí una cantidad relativamente alta de accidentes fatales, por ello, hemos decido implementar esta campaña. Un tranvía de los del tipo T3, rodando a una velocidad de 50 km le toma como 42 metros hasta detenerse por compleo. Si el vagón lleva pasajeros, el tiempo aumenta. Un coche a esa misma velocidad, frena en 12,9 metros.
“Mientras que en los choques de un peatón con un automóvil la mayor parte de los veces el culpable es el conductor, pasa justo todo lo contrario cuando se produce el choque del tranvía con un peatón, es el peatón quien comete errores, muchas veces fatales”, indica Tomáš Neřold, de “Besip”. El año pasado, en Praga hubo 104 accidentes de tranvías con transeúntes y si bien son más de 7 accidentes menos que en el 2017, provocaron la muerte de ocho personas, es decir cinco más que en el 2017.
Al mismo tiempo, el año pasado la Policía Checa registró en la capital casi 700 accidentes de tránsito en donde uno de los involucrados era un peatón. En más de 300 casos la culpa del accidente recayó en el peatón y en cuanto a los efectos finales, 11 de esos accidentes provocaron víctimas mortales.
