Praga (E15.cz) – La ciudad capital Praga sigue rechazando con que se ubique en la Plaza de la Ciudad Vieja una réplica de la Columna Mariana, en el mismo sitio donde estuvo el monumento original, que el pueblo checoslovaco derribó cuando el país se independizó del Imperio Austro Húngaro. Cuando en el Consejo de la Alcaldía Mayor puso el viernes a votación la propuesta de un grupo de concejales de orientación derechista y cristiana para cancelar la posición de rechazo a esa columna, emitida en el 2017, la mayoría rechazó haya cambios. No habrá nueva columna.
Los concejales Jan Wolf (KDU-ČSL), Jan Čižinský (Praha Sobě), Jiří Pospíšil (TOP 09) y Martin Benda (Praha Sobě) querían anular la negativa a que se reinstale la columna y querían también autorizar al escultor Petr Váña y sus colaboradores a iniciar los trabajos de colocación de las piedras que ya están esculpidas y listas. Se ponía como condición que haya el acuerdo sobre el sitio entre el Consejo Ecuménico de la Iglesia y la Conferencia Obispal Checa.
La Columna Mariana estuvo en la Plaza de la Ciudad Vieja hasta el año 1918 y tiene origen en el Siglo XVII. Para el pueblo libre checoslovaco, la columna y la vinculación al cristianismo de los Habsburgo eran una muestra no deseada de los años de sometimiento e intento de cristianización de las tierras checas. Al fin del comunismo, se reactivaron los esfuerzos por conseguir colocar de nuevo la columna, quienes la apoyan consideran que es más el símbolo y el recuerdo de la protección de Praga durante la Guerra de los 30 Años. Aunque también es un importante representante del arte barroco.
Jiří Pospíšil, eurodiputado, jefe del partido TOP 09 y ex ODS, quien en el Concejo Municipal de la Alcaldía Mayor de Praga preside la bancada de “Las Fuerzas Unidas por Praga” (es decir TOP 09 y STAN), dijo a la prensa que, “evidentemente, vamos a tener que regresar al debate de este tema”. Para él no es tan importante la cuestión eclesiática o la interpretación simbólica que se le de a la columna en la Historia Checa; “lo importantes es, también, su importancia como monumento que puede complementar la plaza, devolviéndole su imagen original”.
El alcalde mayor de Praga, Zdeněk Hřib (Piratas) manifestó que considera desafortunado el comportamiento de los que apoyan la columna, especialmente por que ya han intentado reubicarla en la Plaza de la Ciudad Vieja sin el acuerdo de la Capital. Y en la propuesta que presentó el grupo de concejales de derecha dijo que le molestó que la decisión la quieran pasar del Cabildo Mayor a las organizaciones del clero. “Si nosotros aquí no somos capaces de llegar a una conclusión sobre lo que puede estar en la plaza más importante en un área UNESCO, entonces, cabe preguntarnos: ¿qué mismo hacemos?”. Los que defienden la columna resaltan que nació como recuerdo a la protección o defensa de Praga ante los invasores suecos, en el año 1648 y es un símbolo de la Paz. Por lo que Petr Váña comentó que todos quienes hablan mucho sobre la reconciliación, que lo hagan justo en ese punto de la Plaza de la Ciudad Vieja. Desde que Váña intentó colocar las piedras de la balaustrada en el sitio donde estuvo la comuna, hace ya más de una semana, la Policía Municipal praguense ha colocado en el mismo sitio un vehículo de asistencia a los turistas.
