Praga (pamatnik-terezin.cz) – Hasta el próximo 9 de junio podrán admirar en la Sala del Cine del Museo del Ghetto de Terezín la exposición de la artista checa Trude Sojka (1909-2007), artista que luego vivió en Ecuador. La exposición no acerca al incansable desarrollo en la vida de la artista y en su vida, a través de las diferentes fases creativas en su trabajo. La muestra se realiza en cooperación con la “Casa de la Cultura Trude Sojka” de ese país sudamericano.
Durante el Holocausto, muchas mujeres judías se convirtieron no sólo en esclavas del régimen nazi, sino que también muchas tuvieron que pasar ese duro período con embarazos. Después de la Guerra, Trude Sojka se enteró que de toda su familia había sobrevivido sólo su hermano empezó una vida totalmente nueva, en un país totalmente diferente: Ecuador, hacia donde emigró su hermano.
El arte le sirvió como una terapia para ir superando los recuerdos de su país natal, Trude Sojka se esforzó mucho por incluirse en la nueva cultura y sociedad. En la misma forma que muchos de los prisioneros del “Gheto de Terezín”, Trude Sojka, reflejan no sólo los horrores vividos ahí, sino también recuerdos hermosos, esperanza, gratitud al estar viva y un fuerte deseo por la Paz. La obra nació ya después de la Guerra y la exposición puede considerarse como un análisis sin tiempo sobre los cambios en nuestras vidas y sobre las capacidades que tiene el hombre para enfrentar los males y retos. s