
Praga (denik.cz) – Cuarenta personalidades han redactado y escrito un texto con el cual protestan contra lo que estiman es la “manipulación de lo que ocurrió en el año 1989”, es decir el año que derivó en la caída del sistema socialista checoslovaco con lo que se conoce como la Revolución de Terciopelo. Critican dos entrevistas que el diario “Mladá fronta Dnes” (MfD) publicó sobre el aniversario que se acerca del 17 de noviembre. Al mismo tiempo destacan que ese diario es parte de los bienes que posee en primer ministro, Andrej Babiš (ANO 2011), pero que tiene depositados en unos fondos fiduciarios para evitar, como manda la Ley, el conflicto de intereses.
Explican que en las entrevistas o en los artículos aparecen afirmaciones que buscan menospreciar a los estudiantes que plegaron a la huelga, buscan que la opinión pública los vea con menor importancia. Como señala la agencia de prensa ČTK, los promotores y firmantes de la carta son algunos de esos mismos líderes estudiantiles de 1989, así como firmantes de la Carta 77. La dirección de “MfD” rechaza las críticas.
“A medida que se acerque el festejo de este año cuanto más evidente será el que enfrentaremos campañas de manipulación que buscan reescribir lo que pasó en el año 1989, para que calce mejor con algunos de los políticos de hoy”; se lee en el texto. Alertan ante la entrevista que tuvieron con Jiří Jaskmanický, hoy galerista y en 1989 trabajador del aparato del partido comunista. En la entrevista él afirma que la concentración y marcha que terminó provocando la represión y posterior caída del régimen la convocó él. Él sacó el permiso oficial para esa concentración. “El acto de recordación del 17 de noviembre de 1989, en Albertov, fue mi idea”, aseguró Jaskmanický en la entrevista que se publicó el 30 de julio
Los que protestan indican que, sin duda, el diario “MfD” no quiso verificar las informaciones de otras fuentes, por lo que puede llegar a concluirse que el rotativo ha servido como plataforma para propagar teorías conspirativas y para desacreditar a los representantes estudiantiles y lo que pasó en noviembre de 1989. “MfD” ofrecerá una serie de entrevista en un ciclo que llama: “30 años de Libertad” y los que lo ven como acto manipulador aseguran que es parte de los preparativos del propio Babiš en su batalla no sólo con la oposición parlamentaria actual sino también con la oposición anterior.
Los firmantes le piden al público y a los periodistas a cerrar un frente activo que repele los intentos por poner en duda la historia. “A mi me consterna que en el año 2019 alguien desee dictarle a los diarios con quiénes tienen o no tienen que tener entrevistas. Sacar dos nombres de un ciclo de entrevistas es, desde mi punto de vista, bastante tonto. El ciclo de entrevistas debe ser visto como un todo. Ofrece diferentes puntos de vista de los diferentes actores de lo que ocurrió en 1989 y lo hace de tal manera que, en lo posible, la imagen sea lo más completa. Si alguien desea interpretar los acontecimientos del año 1989 de manera tendenciosa, eso es la manifestación de su libre voluntada y tiene derecho a ello. Pero, Mladá fronta Dnes está aquí para mostrar la realidad tal como es y cómo ocurrió o cómo la percibieron los diferentes actores de ese momento”, explicó a la agencia de prensa ČTK, el redactor jefe de “MfD”, Jaroslav Plesl.
Entre los 40 firmantes encontralos los nombres de: Michael Žantovský, Monika MacDonagh-Pajerová, Pavel Žáček, Ivan Havel, Dagmar Havlová, Marta Kubišová, Daniel Kroupa, Jan Ruml, Vladimír Mišík, Jiřina Šiklová, Jaroslav Hutka, Olga Sommerová, Fedor Gál, Michael Kocáb,i Marek Benda y Zuzana Roithová, entre otros (muchos de los cuales corresponden a lo que el presidente Zeman suele llamar “El Cafetín de Praga”, es decir el grupo intelectual/social cercano a Václav Havel y más alineado hacia Washington).
El diario “Mladá fronta DNES” es parte del “Consorcio Agrofert” al igual que el rotativo “Lidové noviny”, editados por “Mafra”. En febrero del 2017 y luego de que se aprobara la enmienda conocida como “Lex Babiš”, a la Ley sobre el Conflicto de Intereses, el millardario político traspasó todas las acciones de su imperio a fondos fiduciarios. Cuando todo parecía que estabe en orden, la Comisión Europea, a propuesta de “Transparencia Internacional Rep. Checa”, analizó con auditorías el pago de ayudas comunitarias a “Agrofert”. Según los resultados preliminares, Babiš sigue en conflicto de intereses por que anque su imperio esté en otras manos, él sigue siendo el beneficiario final de todas sus ganancias y, por lo tanto, puede influir en los procesos presupuestarios del Estado. Babiš no está de acuerdo con las conclusiones preliminares de la Comisión.