
El Banco central checo mantendrá la tasa de interés actual en 2 por ciento. La noticia se supo después de una reunión de la Junta del Banco nacional el miércoles pasado, donde solo dos de los siete miembros votaron por un aumento.
Los analistas han dicho a la prensa el motivo de mantener tan baja la tasa de intereses es la esperada disminución de la inflación