
Praga (E15.cz) – Ayer, antes de partir hacia Bruselas, el jefe del Gobierno Checo, Andrej Babiš (ANO 2011), aseguró a la prensa que la Rep. Checa propondrá sólo un nombre como su representante en la nueva Comisión Europea. Será eurocomisaria saliente Věra Jourová. Ese será el nombre que le dirá a la presidenta de la nueva Comisión, Ursula von der Leyen y con ella negociará, entre otras cosas, sobre el puesto que desearía Praga en su nuevo gabinete.
Babiš comentó también que ya le adelantó esa selección a von der Leyen cuando conversaron telefónicamente. No olvidemos que Jourová ha respondido en la Comisión de Juncker del tema de la Justicia, la Protección del Consumidor y la Igualdad de Oportunidades para Hombres y Mujeres. “Pienso que con el hecho de que es una mujer, pero incluso que ha sido exitosas, podríamos tener la oportunidad de obtener un portafolio económico”, comentó el jefe del Gobierno.
Como ya hemos escrito, Praga ha lanzado ya señales de estar interesada por un euroministerio dedicado a la Digitalización, o al Mercado Interno o al Comercio Internacional. Para Babiš hay oportunidades para que Jourová alcance un euroministerio de importancia debido a que en los más altos cargos comunitarios “no hay un balance geográfico ni de género”. Los cuatro más altos cargos que se decidieron en la anterior Cumbre de la UE, donde se repartieron los cargos de jefe de la Comisión, del Consejo de Europea, de la Diplomacia Europea y del Banco Central Europeo, esos puestos clave quedaron en manos de Alemania, Bélgica, España y Francia. Dos puestos fueron para mujeres y dos para los hombres.
La nota del diario “E15” destaca que, según algunos analistas, que conocen el comportamiento en Bruselas, las expectativas y ganas de los checos podrán quedar afectadas justo por los procesos preliminares de auditoría sobre el primer ministro checo. Los informes señalan que Andrej Babiš se encuentra en conflicto de intereses por que sigue siendo dueño y beneficiario de su consorcio “Agrofert” aunque haya pasado sus acciones a fodos fiduciarios. Por ese problema, la Rep. Checa no sería conveniente para que responda por cuestiones económicas, con nada que tenga que ver con los presupuestos y los subsidios de la UE.
Babiš comentó que esas afirmaciones no pasan de ser malos chismes, carentes de fundamente y afirma que en las reuniones nunca ha oído algo semejante. Cuando el jefe del Gobierno checo se reúna con von der Leyen, será el tercer jefe de un país de la UE que habla oficialmente con ella. Anteriormente lo hicieron el presidente francés, Emmanuel Macron y el primer ministro polaco, Mateusz Morawiecky. Babiš aclaró que no espera poder saber ya en esta semana si Jourová es aceptada como la delegada checa (inicialmente Praga iba a presentar dos nombres) y qué cargo recibirá. Esto lo podremos conocer más bien hasta fines de septiembre.