
Praga – Según expertos en construcción de Suiza, no hace falta derribar el Puente de Libeñ y puede ser reparado y conservado como monumento histórico. Dicho puente, no sólo tiene un valor arquitectónico sino que también histórico.
El puente de Libeñ, en Praga, se encuentra actualmente cerrado debido a su mal estado. Ya se había hablado de derribarlo para permitir la construcción de una nueva infraestructura, así la había informado la agencia ČTK. Inclusive el Ministerio de Cultura había dado el visto bueno diciendo que la obra, realizada en 1926, no es un monumento histórico y por lo tanto se puede destruir.
El profesor de la universidad sueca de Lausanne, Eugen Bruhwiler, ha dicho en su analisis sobre la obra que el puente es reparable y ha presentado una propuesta para arreglarlo basandose en una tesis del instituto Klokner de la ČVUT (el tecnológico de Praga).
El instituto Klokner presentó 4 variantes para resolver el problema con esta vía de comunicación que está en mal estado, pero en todas proponía repararlo y reforzarlo pero nunca habló de crear uno nuevo o alternativo
Otra opción que llegó a proponer el Ayuntamiento de Praga fué la reconstrucción completa del puente pero esto ya se descartó. El cierre de esta vía ha complicado el transito de la ciudad ya que es fundamental para conectar las dos orillas del Moldava en el norte de la ciudad, debido a esto, se ha tenido que desvíar numerosas líneas de tranvías.