Praga (Ceské noviny, Televisión Checa) – Los problemas alrededor del millardario empresario checo, Andrej Babiš, convertido en político, jefe del movimiento ANO 2011 y del Gobierno de minoría junto con los socialdemócratas y la tolerancia de los comunistas, han creado una crisis de confianza entre los ciudadanos hacia el Estado. Crisis que sólo se puede resolver si el “Caso del Nido de la Cigüeña” termina ante un tribunal independiente y se emite una sentencia. Así lo considera la agrupación “Un Millón de Momentos por la Democracia”, la plataforma que en este año organiza una serie de protestas masivas y públicas que piden ya no sólo una Justicia independiente sino también la salida de Babiš del cargo de primer ministro.
Es la reacción del movimiento a la decisión del fiscal Jaroslav Šaroch, del pasado viernes, de dar un giro en su posición frente al caso de Babiš y proponer que el procesamiento sea detenido, no sólo en referencia del empresario político sino también los otros acusados (muchos familiares de Babiš). Para “Un Millón de Momentos” lo de más peso son los hechos constatados en el proceso, así como los demás problemas que arrastra Babiš.
Por ello, le pide a sus seguidores que el 4 de septiembre, cuando se haga el ejercicio habitual de las sirenas del sistema de anuncio de emergencias, se queden de pie, en un sitio público y pidan “el mismo rasero para todos”. La plataforma destaca que esa profundización de los problemas de Babiš crean una gran crisis de confianza entre los ciudadanos en su Estado.
“Si el caso del primer ministro no llega a un tribunal, pocos creerán que eso ocurrió sin su influencia. La crisis se puede resolver si el caso lo recibe un tribunal y si Babiš reduce su conflicto de intereses dejando el cargo. Además, el ministerio de Justicia no debería estar en manos de Marie Benešová (independiente por ANO 2011), sino de alguien sin lazos a Babiš”, señala “Un Millón de Momentos”.