Son tiempos difíciles para ahorrar en la República Checa, convirtiéndose en un desafío para la mayoría de las personas. Según una encuesta realizada por STEM-MARK para Home Credit en junio, el 17% de los encuestados admitió no tener reservas financieras. Mientras que la mitad de ellos han visto reducida o incluso eliminada su capacidad de crear una reserva en comparación con el año pasado. El panorama es desalentador, ya que solo el 9% de los encuestados aseguró que puede permitirse ahorrar más cada mes en comparación con el año anterior. Para empeorar las cosas, un alarmante 52% de los checos están ahorrando menos este año que el anterior.
Dificultades para enfrentar emergencias financieras
El problema es tal que incluso enfrentar una pequeña emergencia financiera se ha convertido en un desafío para muchos. El 15% de los encuestados admitió que no podrían hacer frente a una pérdida anual de ingresos, mientras que una quinta parte vive prácticamente de cheque en cheque y no estaría preparada para afrontar una interrupción de ingresos de tan solo un mes. El defensor del pueblo de los clientes de Home Credit, enfatiza la importancia de ahorrar, aunque sea en cantidades modestas. Sin embargo, con la difícil situación económica, encontrar nuevos empleos o trabajos a tiempo parcial puede ser una misión imposible para muchos. Incluso ahorrar pequeñas cantidades parece una utopía para algunos, pero defensor del pueblo destaca que cada pequeño ahorro cuenta y puede acumularse hasta convertirse en una suma interesante al final del mes.
Soluciones temporales
En cuanto a los gastos, la encuesta reveló que muchos checos tuvieron que hacer frente a atrasos de energía durante este año. El 30% de los encuestados tuvo que enfrentar este gasto adicional, y la mayoría lo pagó con su salario regular. Afortunadamente, el 32% pudo usar sus ahorros para cubrir el desembolso, pero algunos tuvieron que recurrir a préstamos de familiares, amigos o incluso de bancos para hacer frente a esta situación. La realidad financiera de los checos es innegablemente sombría, con un creciente número de personas sin reservas financieras y con dificultades para afrontar emergencias económicas. La incertidumbre económica parece estar afectando la capacidad de ahorro de la población, y el futuro financiero de muchos está en entredicho.
Son tiempos difíciles para ahorrar en la República Checa, convirtiéndose en un desafío para la mayoría de las personas. Pero además hay que sumar la imposibilidad de pagar un alquiler en Praga o resto de la República Checa.