Por fin la fábrica de cerveza checa de referencia Plzeňský Prazdroj dice adiós a las botellas de plástico con sus últimas marcas del grupo cervecero: Velkopovický Kozel y Primus.
La cervecera ya dejó de embotellar en envases de plástico en diciembre, por lo que aún se pueden comprar las últimas unidades en las tiendas. Desde ahora el 70 por ciento de la producción es distribuida en envases retornables y reutilizables. Ya sea en barriles o botellas de vidrio.
Este cambio empezó hace dos años con las marca del grupo: Gambrinus, Radegast y Klasik. Con el fin de llevar una hoja de ruta por un medio ambiente más sostenible. Esta decisión según Plzeňský Prazdroj supondrá la reducción de 1.300 toneladas menos de plástico al año.
Pero para sustituir el plástico es necesario buscar otros envases alternativos.
Nuevos envases para las cervezas de Plzeňský Prazdroj
Para los nuevos envases de cervezas no se puede reutilizar el plático PET porque contienen una membrana protectora interna necesaria para mantener la calidad de la cerveza. Por lo que la línea de embotellado PET de Pilsen, que llevaba en funcionamiento desde 2011 con una capacidad de 18.000 botellas por hora, se desmantelará. Siendo la última botella llenada el pasado 10 de diciembre, de la marca Primus. Tras haber llenado 3,8 millones de hectolitros de cerveza.
Para sustituir los envases de plástico la compañía parece ser que va a optar por aumentar el envasado de aluminio. Ya que según Plzeňský Prazdroj, alrededor de dos tercios de los consumidores han pasado de la cerveza en botellas de PET a las botellas de vidrio retornables, y un tercio compran latas en lugar de PET.
La ventaja del aluminio es que se puede reciclar prácticamente indefinidamente, mientras que la calidad del material sigue siendo la misma. Si se introduce un sistema avanzado, será posible producir latas nuevas a partir de latas viejas casi por completo.
Directora de comunicaciones de Pilsner Urquell, Pavlína Kalousová.
Ya que según Pavlína Kalousová las latas recicladas tienen hasta un 80 por ciento menos de huella de carbono y consumen un cinco por ciento de energía en comparación con las latas de aluminio nuevas. La empresa está trabajando con los proveedores para aumentar la proporción de aluminio reciclado, actualmente se encuentran en un 50 por ciento.
De este modo Plzeňský Prazdroj dice adiós a las botellas de plástico apostando por el reciclaje.